martes, 14 de mayo de 2013

Nurse Jackie

¡¡Buenas noches!!
Para variar, es casi la una y no puedo dormir a pesar de tener mucho sueño atrasado desde la semana pasada. Aprovecho estas condiciones para abrir la sección de pelis/series. 
Realmente tampoco me voy a meter mucho a comentarlas, criticarlas, etc, etc. Sólo me pasaré por aquí para recomendar pelis o series que vaya viendo, que me gusten y que me gustaría recomendar, sólo eso.

Empecemos, pues:
Ahora mismo estoy esperando a que cargue el último capítulo de Nurse Jackie, una "comedia dramática" que transcurre, como era de esperar, entre un hospital y el día a día de su protagonista y homónima, la enfermera Jackie Payton. 
La serie trata de cómo Jackie "hace malabarismos" con médicos, enfermeros, farmacéuticos, formularios y normas para intentar compatibilizar su trabajo y su familia con sus sendos problemas asociados y una adicción a los analgésicos de la que cree depender para poder sobrevivir a su frenética vida y sus dramas asociados.

Hay mucha gente que la recomienda por similitud con House, dado que tiene ese toque de humor negro y adicción a los analgésicos. Sin embargo, yo no creo que sea tan parecida, ni mucho menos.
Mientras que House es una serie "de médicos" esta es una serie "de hospitales". Se trata la diferencia entre los empleados de administraciones hospitalarias y los que aun trabajan como sanitarios y por qué y cómo cada uno toma las decisiones que toma. Distintos estilos de vida dentro de los sanitarios, tanto médicos como enfermeras, problemas sociales varios y, cómo no, el tema de la drogodependencia a sustancias legales todo entorno a una persona que quiere y disfruta tanto su trabajo como su familia pero que es incapaz de compatibilizar ambos.

Drama con el toque ácido de la protagonista, divertidas conversaciones cómplices y excéntricas entre amigas, enfermedades reflejas inoportunas y algún roce divertido con la enfermera jefe.

Si no hay fobia a las series de hospitales, se quiere un poco de trama dramática y social con profundidad de personajes sin renunciar a unas risas, esta es una buena serie.

A quien le guste, espero que la disfrute tanto como yo. Voy a acabarme el capítulo y a dormir unas horillas.


Be HaPpy People~!!

domingo, 12 de mayo de 2013

¡Huchas!

¡¡Hola-hola!!
Vuelvo por aquí más tarde de lo prometido para no perder costumbre. Hoy os traigo mis huchas de las que sólo me atribuyo el mérito de la decoración. Porque el diseño no tiene misterio y viene hecho por parte de los fabricantes del producto original.

Os presento primero la que usé hasta hace unos meses:

 

Sí, lo sé, no es ni más ni menos que una botella del diseño viejo de Nestlé Aquarel pintada de colorines al gusto. Pero, ¿no queda genial? Además es muy práctica y económica para ahorrar monedillas varias y evitar la tentación de gastarlas sin tener que romperla igual que el clásico cerdito de cerámica que tanta lástima nos da romper por lo bonito, por lo peligroso o por lo caro que pueda haber llegado a ser.

La adaptación a gusto personal es fácil y económica. 

Sólo necesitamos:

  • Una botella de plástico que nos guste (normalmente PET, de refresco o agua)
  • Pinturas de látex (yo usé la Pajarita, pero supongo que hay más marcas relativamente baratas en papelerías. ¡Ojo! No acuarelas: la pintura se tiene que adherir al plástico.)
  • Útiles para pintar: pinceles, botes, agua, trapo o papel...
  • Cutter o bisturí o punzón y tijeras
  • Super-glue

Y lo usaremos así:

  1. Hacemos una ranura con un cutter, bisturí u otro tipo de cuchilla cortante para meter las monedas en la parte de plástico blando. Yo la hice justo bajo del tapón en la parte curva. Es difícil hacerla recta como habréis podido observar, así que os recomiendo que se use algo duro de guía y/o que se haga despacio y con todas las precauciones del mundo para no cortarse.
  2. Se pinta al gusto siguiendo (o no) el diseño de la botella o el que nosotros hayamos decidido previamente. 
  3. Cuando esté seco se pega el tapón con Super-glue
Y ¡lista!

Cosas a tener en cuenta:
  • Los pasos 1 y 3 es recomendable, si no casi obligado que las realice un adulto o alguien medianamente responsable que evite dedos pegados y cortes peligrosos. Sin que sirva de precedente: la acetona (presente en el quitaesmalte) suele ser bastante efectivo disolviendo el Super-glue. No olvidar que se fusiona con la piel, por lo que nada evitará el pegote una buena temporada.
  • Sin dar ideas: Si os fijáis en las fotos de arriba hay un corte pegado en la parte superior contigua a la ranura por la que se meten las monedas. Sí, llegado cierto punto, abrí la hucha, vacié el contenido y volví a pegarla con super-glue. La reutilicé. La hucha de la que no se puede sacar el dinero sin romperla, sobretodo en este caso, es más voluntad por ahorrar y respeto por el trabajo de uno mismo que no querer romper algo que ha costado dinero o es bonito. Hay que poner voluntad. No garantiza nada.

Vista mi vieja hucha, os hablaré de la nueva. Aunque en la que acabo de presentar un pelín más arriba también se pueden meter billetes, es más incómodo. La nueva es más práctica para eso, se pueden meter monedas igualmente, se pueden guardar pequeñas notas motivando al ahorro, disuadiendo de gastar o en los que anotemos entradas, salidas, objetivos y deudas (por poner un ejemplo, todo lo anterior cabe dentro porque lo he probado xP ). Es, simple y llanamente un bote.


"Y ¿ya está?" Pues sí. Quería algo sencillo, como lo de antes una base hecha a partir de algo cotidiano que no me dé pena romper y ya llevaba idea de otra botella un bote de refresco o algo así, entonces empecé a ver New Girl (V.O. SIEMPRE, el doblaje español da ganas de lanzarle el mando a la tele y salir corriendo) y su Douchbag Jar y empecé a darle vueltas a una posible versión del carismático bote.

Empecé a darle vueltas, realmente el bote era para ahorrar y ya está, no había ningún motivo por el que entrara dinero, ningún juego asociado y hacer un Douchbag Jar sin ser un Douchbag Jar me pareció absurdo. Así que decidí que sería un bote de cristal y lo fusioné con la idea de la hucha anterior, pero con un decorado hecho por mi (aunque la inspiración fuera externa). Tras varios intentos de dibujar cachemir y mil y un patrón sin éxito, acabé recurriendo a tumblr para buscar ideas. Con las puntillas no tuve éxito, ni sobre papel ni sobre vidrio. Así que finalmente decidí que las líneas rectas y el arte milenario de las cenefas iban a ser la solución para el decorado de mi nuevo medio de ahorro.
Este es el boceto del estilo que quería dejar.
Dado que mi experiencia con los anteriores patrones me habían demostrado que pintar sobre el bote no era precisamente fácil con el tubo de pintura, decidí que las líneas rectas y dibujitos pequeñitos y repetitivos era precisamente lo que, con más probabilidad, me iba a salir bien. Así que procedí, por fin, a decorar mi Saving Jar.


Para ello he usado:

  • Un bote de cristal del tamaño deseado.
  • Pintura para vidrio para hacer contornos con relieve (contorno relieve negro).  
  • Cinta adhesiva.
  • Una regla con un lado plano que tenga el típico agujero en un extremo. 
  • Pintura de colores para pintar vidrio por la técnica de vidriera con contorno relieve (he usado las de base disolvente, aunque hay otras).
  • Material para pintar: pinceles, un bote con agua, un bote con aguarrás y un trapo.

Y lo he hecho así:
  1. Para trazar las líneas rectas que separan las cenefas, he fijado la regla con cinta adhesiva a la mesa de trabajo, de forma que, pasando por el agujero la cánula del tubo del contorno relieve quedara a la altura en la que quisiera la línea más baja del decorado. Una vez fijada y con la cánula a través del agujero, vamos girando el bote para hacer la línea. Cada vez que acabemos una línea, soltamos la regla y la fijamos de nuevo a la altura de la siguiente, lo que nos permite hacer todas las líneas con una diferencia de altura equidistante.
  2. Cuando ya están las líneas rectas hechas, se pintan los espacios de colores. Hay que tener en cuenta que esta pintura tarda en secar y que es específica para técnica de vidriera con contorno
    relieve, por lo que tendremos que tener cuidado de que, por gravedad, no desborde por uno de los contornos ya secos: tendremos que ir dándole vueltas al bote un par de minutos después de cada ralla de color, antes de pintar la siguiente hasta que deje se chorrear (el secado superficial tarda 1 hora y total de 1 día según las instrucciones). Orientativamente, no hay colores primarios en la marca que yo compré, así que finalmente he usado rojo, amarillo, azul turquesa y morado para pintar y hacer las mezclas del resto de colores.
  3. El siguiente paso sería pintar los patrones dentro de cada línea con la pintura de contorno relieve, tras el secado total de la pintura de colores. 

Yo este último paso no lo he hecho porque me ha parecido que ya quedaba muy oscuro como hucha para los colores vivos que yo esperaba ver, como para echarle aun más pintura y restarle entrada y salida de luz. Aunque, para los que estén indecisos, hay que tener en cuenta también, que cuando se meten papeles dentro y cuando se mira a contra luz la percepción del color mejora mucho.


También se puede completar pegando la tapa con super-glue y agujereando la tapa para poder meter monedas y billetes convirtiéndola en una verdadera hucha tipo cerdito (hay que romper para poder sacar el dinero).

De momento, es todo por hoy. Por mi parte, la hucha queda así y la idea del boceto de antes finalmente seguramente la use para hacer un portavelas, aunque las posibles variaciones de las dos huchas que he puesto hoy, no sólo son fáciles de hacer, si no que se pueden tener distintas funciones.



Espero que haya gustado y que la gente se vaya animando a reutilizar cosas de casa no sólo para economizar y respetar el medio ambiente, si no también como medio de entretenimiento, aprendizaje y socialización cuando se practica en grupo.

Lo importante es disfrutar, tanto del proceso, como del resultado.


Be HaPpy People~!!